Fue una experiencia muy gratificante poder compartir el Día del Niño con los pequeños que están internados en el hospital materno infantil de Salta. Les llevamos regalos y juguetes para que se divirtieran y se olvidaran un poco de sus problemas. También estuvimos charlando y apoyando a los padres, que necesitan mucho ánimo y esperanza. Nos llenamos de alegría al ver sus sonrisas y sus ganas de vivir.